CUENTO IRLANDES...En el Mundo mágico existen muchas hadas, buenas y malas. Aquí les cuento, la historia de una heroína que siempre será recordada; por ellas.
El Universo encantado era un caos. Las fuerzas del mal, se habían apoderado de él. No existía más la luz, ni los arco iris. Las hadas estaban baJo el encanto de un sueño profundo. Los duendes estaban desaparecidos.
En un bosque desconocido,
una pequeña hada se había quedado dentro de una cueva; dado que le encantaba probar nuevas flores como alimento. Cuando salió de allí, pudo ver la oscuridad que la rodeaba; se escuchaban a lo lejos gritos y lamentos.
Fue escondiéndose detrás de las hojas, y de los troncos de los árboles. Las hadas estaban desparramadas, se acercó a ellas; pero estaban totalmente dormidas. En un momento se dio cuenta, que siendo hada no había sucedido lo mismo con ella.
Allí se dio cuenta que estaba protegida del hechizo, que habían lanzado los malignos. Fue urgente a la cueva donde había estado, a buscar sus tan preciadas flores. Cuando llegó las transformó en pequeñas gotas, para colocárselas en las bocas de sus amigas las hadas.
Salió volando con tanta rapidez, que sus alitas se entrecruzaban. Así fue como, una a una dio a beber el elixir. De nuevo apareció la luz, y los Arco Iris. Con el brillo del Sol, todos los malignos se comenzaron a transformar en cenizas.
Fue escondiéndose detrás de las hojas, y de los troncos de los árboles. Las hadas estaban desparramadas, se acercó a ellas; pero estaban totalmente dormidas. En un momento se dio cuenta, que siendo hada no había sucedido lo mismo con ella.
Allí se dio cuenta que estaba protegida del hechizo, que habían lanzado los malignos. Fue urgente a la cueva donde había estado, a buscar sus tan preciadas flores. Cuando llegó las transformó en pequeñas gotas, para colocárselas en las bocas de sus amigas las hadas.
Salió volando con tanta rapidez, que sus alitas se entrecruzaban. Así fue como, una a una dio a beber el elixir. De nuevo apareció la luz, y los Arco Iris. Con el brillo del Sol, todos los malignos se comenzaron a transformar en cenizas.
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